El Subsecretario de Energía, Luis Felipe Ramos fue el encargado de certificar a un grupo de once taxistas de la Región Metropolitana, que se acogieron a la primera versión del programa “Mi Taxi Eléctrico” y que fueron los que, a lo largo del monitoreo por casi un año, se convirtieron en los taxistas que lograron la mayor cantidad de emisiones contaminantes evitadas, gracias al cambio de tecnología de sus vehículos.
El programa MTE 1.0, forma parte del trabajo que impulsa el Ministerio de Energía y la Agencia de Sostenibilidad Energética, que busca potenciar la electromovilidad en el transporte liviano a través del recambio de vehículos a combustión interna por tecnología 100 % eléctrica.
Los beneficios directos que obtuvieron los primeros 50 beneficiarios del Programa, se refieren al cofinanciamiento de hasta 8 millones de pesos para la adquisición de un vehículo eléctrico; financiamiento del 100 % del costo del cargador domiciliario y su correspondiente instalación;
mejores ofertas al cotizar el vehículo con su sistema de carga y apoyo técnico permanente para el mejor rendimiento de la nueva tecnología. Sin embargo, para los propios usuarios el hecho de generar menor contaminación con sus vehículos representa un alto valor social y medioambiental que ya promueven entre sus pares.
Al respecto, el Subsecretario de Energía, Luis Felipe Ramos señaló que “El Gobierno se ha planteado un plan ambicioso, según la Estrategia Nacional de Electromovilidad, al año 2035 el 100% de las ventas de vehículos livianos y medianos deberán ser cero emisiones, por ello la buena noticia es que los resultados de este programa son muy auspiciosos y nos permite ratificar que vamos en el camino correcto”. Asimismo, agregó que “Esta experiencia ahora esperamos sea asumida por los Gobiernos Regionales de manera de iniciar un proceso de carácter nacional
apuntando al uso progresivo de la electromovilidad”.
Por su parte, Cristina Victoriano, Subdirectora de la Agencia de Sostenibilidad Energética destacó que “Este grupo de once taxistas se ha transformado en un verdadero equipo de embajadores de las ventajas de la electromoviidad y las energías limpias, los resultados y mediciones iniciales son claras al respecto, si alguien tuvo dudas de los beneficios de un taxi eléctrico, claramente esas dudas son parte del pasado”. En tal sentido, indicó que “vemos con alegría que estos trabajadores y trabajadoras del transporte han vivido un cambio positivo en la economía familiar y de paso vemos como se validan al saber que ya no están contaminando con sus vehículos”.
Uno de los taxistas destacados en la jornada, Ramón Navarro, recordó que “cuando le conté a mis colegas que me compraría un taxi eléctrico fui víctima de bromas permanentes, sin embargo, al poco tiempo de estar circulando en mi nuevo taxi, mis colegas no podían creer el error
que cometieron de no sumarse a este programa. Hoy además que saben los costos económicos que tengo, solo tienen una sana envidia y varios trabajan pensando en pronto hacer la inversión de un vehículo eléctrico”.
Por su parte, María Isabel Chávez, taxista, dijo que “la vida tiene un antes y un después de trabajar en mi taxi eléctrico. En dos años de trabajo jamás he gastado un peso en repuestos, el ahorro diario de combustible es increíble y además mis hijos adoran subirse al vehículo cuando no trabajo porque ellos saben que estamos ayudando a limpiar nuestra ciudad. Actualmente estaría gastando cerca de 35 mil pesos diarios en combustible, sin embargo, hoy diariamente mi costo de energía no supera los 6 mil pesos y para una madre soltera créame que es un cambio increíble en mi presupuesto”.
Finalmente, el Seremi de Energía de la Región Metropolitana, Iván Morán manifestó que programas como este van en la dirección correcta y que “hoy vemos ya en números y estadísticas lo que antes solo podíamos proyectar. La Región Metropolitana necesita de manera urgente acciones concretas para cambiar los efectos del calentamiento global y políticas públicas como esta, nos entusiasma y nos alienta a seguir haciendo esfuerzos en esta dirección”.
Cabe señalar que, de acuerdo a las mediciones y datos aportados por los taxistas beneficiarios del programa, se establecieron ahorros de combustible de un promedio de 250 mil pesos mensuales, menores costos de mantención de sus vehículos eléctricos, el permanente reconocimiento del público de viajar en vehículos más silenciosos y el mismo reconocimiento de disminuir la emisión de partículas contaminantes.